Un mundo infeliz

¿Sabías que las depresión es diez veces más frecuente en la actualidad que en los años 60 y que su edad media de aparición se ha reducido considerablemente? Es decir, que hoy en día, los jóvenes se deprimen más y la población en general es más infeliz. ¿Cómo es esto, nos preguntamos? Viviendo en un mundo desarrollado, donde todas las posibilidades están a nuestro alcance, un primer mundo rico y libre. Un mundo lleno de cosas hermosas...Somos un poco dicotómicos en este aspecto. Tendemos a afirmar que es verdad que en el mundo existen cosas maravillosas; pero, por otra parte, sentimos que todo se destruye y que la realidad es horrible e injusta, e incluso experimentamos que la mayoría de las cosas que deseamos no las podemos alcanzar, viviendo atados a situaciones que hemos de soportar para poder sobrevivir. Esto es un hecho, pero no porque sea real quiere decir que no sea modificable y que seamos nosotros mismos los que podemos cambiar nuestro estilo de vida.
El problema es que muchas veces esperamos que venga de fuera la solución a nuestros problemas ("si yo fuera...", "si yo consiguiera...", "si ganase...") cuando realmente ésta sólo puede salir de nosotros mismos. La historia muestra cómo ha habido hombres y mujeres que han conseguido grandes cosas sólo a base de fe, voluntad y esfuerzo.
Al principio no será fácil y te sentirás fácilmente derrotado. Luego todo será más sencillo...
¿Te animas a seguir?